El premio a un guerrero
Alejandro Allub es cardiólogo pediátrico. Nunca fue un gran fanático del rugby aunque le encantaba jugar. Sin antecedentes familiares, se unió al Jockey Club de Córdoba donde su tamaño y habilidad le valieron un temprano prestigio.
En 1996, con 19 años, representó a Los Pumitas en el entonces SANZAR/UAR M21; volvería al torneo un año mas tarde donde se destacó tanto que cuando Los Pumas jugaron su siguiente partido, el Turco Allub hacía su debut internacional.
Pronto sería titular del seleccionado. Apoyó un try clave en un momento bisagra. Bajo la lluvia de Llanelli, su try y el botín de Gonzalo Quesada hundieron a Samoa y marcaron el comienzo de una nueva era del rugby argentino con el quinto puesto en el Mundial 1999 en Gales.
Dejó de lado sus estudios para mudarse al rugby profesional francés en Perpignan. El 23 de junio del 2001, en el estadio Jade de Christchurch, su vida cambió.
Habiendo jugado frente a los All Blacks en la derrota por 67 a 19, se descompuso en el vestuario, comentando que le dolía el pecho. Resultaría ser un infarto de miocardio. El exjugador de handball vio forzado su retiro involuntario, evitando así poner en riesgo su vida. Su carrera, cuando se dirigía a ser uno de los mejores segundas línea de la historia de Los Pumas, se apagaba después de 29 tests.
Regresó a Córdoba y se enfocó en sus estudios, pero el bichito del rugby había crecido dentro suyo. Y le picaba. Volvió brevemente en el 2002 y el 2005 pero para el 2009 estaba listo para calzarse nuevamente los botines.
Ya como médico, se aseguró de que no corría riesgos en una cancha de rugby. Su único objetivo era recuperar los buenos momentos con sus compañeros. Su ambición era divertirse con el rugby. Ya no estaba el hambre que se requiere para el rugby internacional o el deporte profesional.
Lentamente, dio sus primeros pasos en el club. Su corazón respondió y supo que dependía de él ver hacia donde su renovada carrera lo llevaba. Su habilidad con la pelota y su entendimiento del juego no los había perdido. La pasión por su club y provincia seguía intacta.
Jugó para Córdoba en el 2010 y cuando arrancó la actual temporada, su objetivo era ganar el Campeonato Argentino, algo que lo había eludido tanto por estar retirado o por estar con Los Pumas o en Europa.
Este año, Los Dogos ganaron el Cross Border y se llevaron con mérito el Campeonato Argentino. Allub fue clave, liderando con el ejemplo. A los 32 años, su hambre de gloria era evidente, mas aún en la final donde tuvo un gran partido.
Si Dimas Suffern Quirno hubiera convertido su penal en el minuto 82 para darle el título a Buenos Aires, hubiese sido un triste final para la carrera provincial de Allub, gran guerrero y mejor persona. Falló; el Turco y Córdoba celebraron.
Se acaba de retirar del rugby provincial. «Me estoy poniendo viejo,» sonrió.
Por Frankie Deges
Ambito Financiero