«Es muy difícil que España pueda jugar el próximo Mundial»
Pablo Feijoo (en el centro de la foto, sin la pelota) - Foto: Marca
El veterano medioscrum, Pablo Feijoo, es uno de los jugadores españoles de mayor calidad de la última década. Empezó en el Atlético Bera-Bera y ahora milita en Cetransa El alvador, tras pasar por Cisneros y CRC Madrid. Y es uno de los pocos que ha llegado a jugar en Inglaterra, en concreto en los Leicester Tigers.
Feijóo, que el pasado sábado ante Uruguay (ganó España 16-13) cumplió 50 partidos internacionales con el ‘XV del León’, del que durante varios años fue su capitán, reconoció que «es muy difícil que España se clasifique para el próximo Mundial», el que se disputará en Inglaterra 2015.
El sábado pasó a formar parte de la lista de dieciséis internacionales que han podido celebrar 50 o más ‘caps’ con España y que lidera Fran Puertas con 93.
«Nos falta más complicidad entre los jugadores, que pasen más tiempo juntos, que tengan más amistad… con tiempo, con más partidos y continuidad, se conseguirá»
Preguntado por sus recuerdos, el jugador aseguraba que «buenos tengo casi todos. Yo soy una persona que los recuerdos buenos los guardo y los malos los trato de olvidar».
Pese a ello, «eso sí, uno de los peores que recuerdo fue el primer partido de Ged Glynn – el anterior seleccionador- contra Portugal, en Palma de Mallorca. Nos hicieron dos tries por mi culpa, me salió todo mal, me rompieron la nariz. Fue un desastre todo. En el otro lado, un partido de otro nivel, de la Copa de Europa de regiones, entre Euskadi y un equipo francés, en Eibar, y me salió muy bueno y di varias asistencias de try. Entonces, Ged me dijo ‘has mejorado y te mereces estar en la selección’. Dicho y hecho».
Sobre la situación de la selección española, tan cuestionada desde algunos foros, Feijóo dijo que «nos falta más complicidad entre los jugadores, que pasen más tiempo juntos, que tengan más amistad. Es verdad que en este equipo algunos vienen de Francia y otros de la Liga española y es más difícil. Supongo que con tiempo, con más partidos y actividades y continuidad, se conseguirá».
El actual seleccionador español, el francés Regis Sonnes, ha convocado, desde julio de 2010, a muchos jugadores de su país con origen español, que en determinadas citas han sido más que los nacionales. Feijóo declaró al respecto que «yo creo que tienen que venir jugadores de fuera, pero que tengan un buen nivel. Fabien Rofes, por ejemplo, me parece un hooker que marca la diferencia con cualquier jugador español y si le llaman, nadie se va a poner en contra del entrenador y los propios jugadores que se quedan fuera lo van a aceptar porque van a ver que es mucho mejor. El problema es cuando se trae a jugadores mediocres que no son mejores que los que hay aquí. Hay que incorporar jugadores que sean de una calidad muy superior».
«Bastante culpa tenemos los jugadores que no hacemos atractivo el producto que tenemos, deberíamos estar físicamente mucho mejor y dar más espectáculo»
Preguntado por el entendimiento entre los miembros de la selección, el medio tampoco se andó por las ramas. «Intentan hablar castellano y nosotros chapurreamos francés. Si hay presión es más complicado porque te sale tu idioma materno. Yo en el campo les habló en francés y en castellano, si hay presión le habló en castellano y si tengo más tiempo en francés. Los anglosajones que juegan en España hablan muy buen castellano, con ellos no hay ningún problema».
España sólo ha jugado un Mundial de los siete que se han disputado, el de Gales en 1999. A este respecto, reconoció que «es muy, muy difícil que España se clasifique para el próximo Mundial. Habría que empezar con los chavales de 17 o 18 años, tenerlos en la residencia de Alto Rendimiento, en Madrid o donde fuere para que sean profesionales o semiprofesionales, aparte de darles unos estudios y luego cederlos a los clubes cada fin de semana. El próximo Mundial creo que a este equipo le agarra muy pronto y si trabajamos a ocho años sería más factible».
Por último y sobre la mayor o menor popularidad del rugby en España, Feijóo volvió a asumir responsabilidades. «Bastante culpa tenemos los jugadores que no hacemos atractivo el producto que tenemos, deberíamos estar físicamente mucho mejor, dar más espectáculo y mover mucho más rápido la bola; si se hace así, es un deporte que la gente se engancha».
«Digo que los jugadores tienen la culpa, pero los árbitros también tienen una gran responsabilidad ahí a la hora de dejar jugar más la pelota para que el juego sea más vistoso y captar al espectador», argumentó el internacional, antes de concluir que «no cambiaría las reglas. Dejaría jugar los penales más rápido, no explicar tanto; si hay que explicar algo se explica después: la pelota tiene que moverse.
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