«Era un asunto de la cabeza y el cuerpo»
Jonny Wilkinson habla de su retiro
La palabra del ex-apertura del Toulon y de Inglaterra luego de su retiro. Jonny Wilkinson (35 años, 97 caps) nunca había vertido comentarios sobre lo que había sentido en los últimos meses y años…
¿Qué estado de ánimo sentiste cuando te diste cuenta luego de tu ultimo partido que tu carrera había terminado?
Pasamos un día estupendo en Toulon. Cuando me levanté por la mañana, me sentí muy bien. En mi carrera, sobre todo después de la Copa Mundial de 2003, todo ha sido siempre difícil. El retiro fue muy interesante para mí era un asunto entre mi cabeza y mi cuerpo. Al final, he escuchado a mi cabeza más que a mi cuerpo. Pero salio todo bien porque terminamos bien, asi que este era el momento adecuado para que me vaya.
¿Es difícil seguir adelante?
Por supuesto que hay cosas que voy a perder. Pero fue una buena decisión parar. Seguí porque no estaba seguro de mi decision. Me hace mucho bien seguir como entrenador porque me encanta el rugby, pero sin la presión que yo siempre me puse a mi mismo. Esto es de lo que siempre me he querido escapar. Ahora puedo hacer lo que me haga feliz, no imperativamente. Esto es por diversión.
¿Sos un hombre diferente ahora?
Sí, creo. Yo veo el mundo de una manera ligeramente diferente. Debo, por supuesto, acostumbrarme a ciertas cosas. No levantarme por la manana e ir por dos horas a entrenarme solo a patear pelotas. Fue una terapia enormemente útil para mí pasar dos horas sólo pateando la pelota. Era una manera de enseñarme cosas, para resolver los problemas en mi vida. Ahora lo que motiva y me inspira es hacer el bien a otros jugadores.
¿Querias ser entrenador?
Si. Yo sabía que con todo lo que había aprendido en mi vida, cientos de entrenamientos durante mi carrera, esto sería útil para transmitir a los demás. Hubiera sido un error no hacerlo. Me doy cuenta de que en mis últimos dos o tres años, el placer fue solo «sobrevivir». Ganar para sobrevivir. Sólo para que todo salga bien. Cuando las cosas iban bien, pensé, ya está hecho, es bueno, pero nunca aparecia la sonrisa. Siempre había algo en mi cabeza que no estaba funcionando muy bien. Ahora me encuentro un poco más capaz de tomar cinco minutos o una hora solo para mí mismo.
Hay felicidad y el sufrimiento en todo lo describis…
Durante mi carrera, eso fue todo. Después de la Copa Mundial de 2003, lo que hice se convirtió en algo necesario, pero no es un placer. Yo también pensaba en los resultados. Todo el tiempo el estrés y la presión.
¿Qué pensas acerca de tu carrera?
Hay dos cosas que me han cambiado: la Copa Mundial de 2003, que generó una gran presión y mi cuerpo con todas las lesiones. He estado sin jugar durante tres o cuatro años, y después de eso me parecía a alguien que no encontraría su nivel. Me veía como alguien que se aferraba a todo con las uñas. Cada vez que algo salia mal, pensé que se me iba a caer encima. Miro a mi carrera, tal vez como una pérdida de una parte de mi vida. Es demasiado difícil con la personalidad que tengo. He probado el lado espiritual con el budismo, para encontrar una forma más pacífica y más relajada. Pero no pude. Cada momento en un partido es demasiado importante para mí. Imposible escapar de eso. Seguí así hasta el final, sabiendo que era mi forma de ser…
Rugbyrama