Dicen que todos los «Perros» van al cielo
Hector "Perro" Emaides
Hector «Perro» Emaides
Día triste para el rugby y la música de Córdoba. Ayer por la mañana fallecia, Hector «Perro» Emaides, ex jugador de ACV, Taborin RC y uno de los creadores del Cosquín Rock.
Hector era un «loco lindo» y un personaje muy querido por todos en el club. Aquel perro de presa en la cancha que estaba siempre en la jugada y donde el juego lo necesitaba, una rueda de auxilio, esencial para cualquier equipo.
Jugaba de tercera linea (6) y formo parte de aquel equipo inolvidable que ascendiera a primera division en 1981, donde compartimos mil viajes, anécdotas y hablabamos de música, con el sueño siempre presente de algun dia poder poner su primer discoteca.
Hecho que se hizo realidad y a la cual llamo «Mussnak». Mussnak, ubicada en el centro de la ciudad, con el paso del tiempo se convertiria en un lugar clave para los amantes de la buena musica y para nosotros un punto de reunion de la «banda» del club.
Su exitoso negocio de la decada de los 80/90 lo llevaria luego a convertirlo en productor llevandolo a ser uno de los creadores del Cosquin Rock, realizando en 2001 su primera edición.
«El perro» era un tipo feliz, que hizo lo que le gustaba con mucha pasion, tanto en el rugby como en su trabajo. Como jugador fue pieza clave de la primera del club durante muchos años, ademas de jugar tambien, en seleccionados provinciales. Como productor realizo muchisimos eventos, donde actuaron musicos de la talla de Rick Wakeman, Steve Hackett, Steve Howe y King Crimson entre otros.
Pero mas allá de sus logros, me gustaria recordarlo por esencialmente lo buen ser humano que era, con su chispa, locura y alegría, que sin duda permaneceran siempre en el corazon de muchos de nosotros y en las quintas de nuestro querido club.
Gabriel Ledesma, un compañero de batallas en la tercera linea, escribia en el What’sapp del club:
«Que tristeza enorme !!
Dicen que Todos los Perros van al Cielo.
Ahí les va un Lazarillo !!!
Él va a guiar a todo aquel que se crea perdido cuando debamos partir.
Un compañero de fierro.
Me quedo con su sonrisa llena de picardía y su hermosa locura.
Que Dios y el Flaco (Ninci) te abracen fuerte dándote la bienvenida Héctor querido.
Nuestra amistad perdurará en el más allá. »
Hasta pronto amigo.
Por Pablo Csáky
MoHicanosrugby.com
