¿Creció el interior o el rugby porteño está devaluado?
Sin duda que la imprevista eliminación de Buenos Aires en el Campeonato Argentino y la persistente actitud de algunos clubes de la URBA en mantener encendido el interminable conflicto del PLADAR (postergar la prohibición hasta el 2011), es la preocupante realidad que hoy domina el rugby argentino. Intentar conciliar dos posturas antagónicas con un parche, es como frenar dos locomotoras que marchan en sentido contrario. Es intentar cambiar, para que nada cambie.
Y como hemos hablado tanto de este reiterado tema vamos a ocuparnos de la fugaz actuación del equipo porteño en el Campeonato Argentino. Desde que Provincia y Capital se unieron para potenciar al seleccionado de Buenos Aires, este imbatible equipo integrado por jugadores de Los Pumas, fue prácticamente, “el patrón” del torneo. Alzar la copa era simplemente un trámite y ganar el Campeonato Argentino era la sana costumbre.
Esto fue así hasta la aparición del poderoso equipo de Tucumán que rompió esa hegemonía en el año 1985.
Buenos Aires fue tradicionalmente el mandamás desde la unificación de Capital y Provincia, allá por el año 1962. Desde su inicio, Buenos Aires obtuvo 34 títulos, Provincia 11, Tucumán 9, y 5 campeonatos quedaron en manos de Capital y Córdoba.
Ante semejante poderío y para que no “fuera robo”, Buenos Aires formó dos equipos: Capital y Provincia. Entre las dos selecciones acumularon todos los títulos desde 1945 hasta 1960. (Provincia 11 campeonatos y Capital 5). Buenos Aires festejaba siempre. Eran Los Pumas que se cambiaban la camiseta.
Hasta que apareció Tucumán en 1985 con la “naranja mecánica”, integrada por una camada de jugadores notables como Pablo Garretón, el Cheto Santamarina, Santiago Mesón, Pablo Buabse y Perico Merlo.
Así fue que entre tucumanos y porteños se alternaron los festejos. Buenos Aires también tenía un equipo poderoso que era la base de unos Pumas ganadores con Hugo Porta, Chapa Branca, el Flaco Ure, Gabriel Travaglini, el Tano Loffreda, Rafa Madero, Diego Cuesta Silva y el Bebe Salvat.
Pero la pulseada la ganó Tucumán con 7 títulos en diez años.
¿Por qué la unión más poderosa del país quedó eliminada en la primera vuelta?
Los números son irrefutables. La URBA tiene 16 mil jugadores federados. Cada fin de semana se juegan 250 partidos. Y Buenos Aires suma el 45% de la cantidad de jugadores fichados por la UAR.
¿Creció el interior o el rugby porteño está devaluado?
Son muchas las causas que han generado esta crisis del rugby porteño. Podríamos mencionar que algunos jugadores rechazaron la convocatoria argumentando cansancio o saturación. Que en años anteriores Buenos Aires era una atractiva vidriera para llegar a Los Pumas. Que la preparación del equipo porteño no fue la adecuada para un campeonato nacional donde intervinieron selecciones con una preparación impecable.
Un ejemplo, Córdoba trabajó todo el año para llegar de la mejor forma al Campeonato Argentino. Otra alerta a futuro es que la selección porteña no tiene giras programadas, ni tampoco una agenda internacional exigente.
Y por último, es difícil alcanzar el éxito en cualquier deporte si todos los años cambian los entrenadores, los jugadores y hasta la camiseta.
No debemos olvidarnos que en el Mundial de Francia Los Pumas exhibieron una conmovedora lección de amor por la celeste y blanca…
Por Adolfo Etchegaray
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